En este proyecto trabajé en el diseño interior de un pequeño departamento, donde los metros cuadrados eran acotados y cada decisión debía responder a criterios de funcionalidad, sin perder la calidez del hogar.

Se priorizó un diseño limpio y luminoso, con una paleta neutra y toques de madera clara, que amplían visualmente los espacios. La elección de mobiliario de líneas simples y soluciones integradas permitió optimizar el uso diario y el almacenamiento, evitando elementos voluminosos.

Se incorporaron todos los requerimientos del cliente:
• Espacio de comedor cómodo y bien iluminado.
• Zona de escritorio incorporada al mobiliario del dormitorio.
• TV en la habitación.
• Recibidor funcional abierto al estar.
• Baño y cocina con materiales claros, detalles rosados y gran organización.

Como elemento distintivo, se utilizaron puertas corredizas tipo shoji, que aportan ligereza visual y un sutil estilo japonés que se integra de forma armoniosa al conjunto.

Proyecto colaborativo con Wierna Agustina, Mateluna Camila y Jorge Luis.